México mejora en combate al trabajo infantil, pero sigue siendo de los peores de AL

México tuvo “un avance considerable” en la lucha para que niñas, niños y adolescentes no trabajen, señala el informe Hallazgos de 2020 sobre las peores formas de trabajo infantil, del Departamento del Trabajo de Estados Unidos. Pero todavía una gran parte de esa población es sometida a explotación sexual con fines comerciales, a veces como consecuencia de la trata de personas, la producción y tráfico de drogas y actividades peligrosas en la agricultura.

Con al menos 3.1 millones de niñas y niños trabajando, el país sigue siendo el segundo con mayor número de menores de edad en esta condición en América Latina y el Caribe. Y, según especialistas, se espera que esa cifra haya aumentado por la pandemia de covid-19, señaló la agregada laboral del gobierno estadounidense Mary Ellison.

La funcionaria dio a conocer el documento durante la conferencia virtual Obligaciones Laborales de T-MEC, organizada por el Consulado General de Estados Unidos en Guadalajara.

Explicó que llevaron a cabo esta evaluación en diferentes países del mundo, los avances en la erradicación de las peores formas de trabajo infantil las clasificaron en mínimos, moderados y significativos. México se encuentra en este último rubro.

Durante el período que abarca el informe, el gobierno mexicano publicó la Encuesta Nacional sobre Trabajo Infantil (ENTI) —financiada por Estados Unidos— ratificó el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre trabajadoras del hogar, reformó la Ley de Migración y la Ley de Asistencia y Asilo para Refugiados para prohibir la detención de niñas y niños en centros para migrantes y garantizarles educación en su estancia. Eso le valió ser evaluado de esa forma.

No obstante, “el 52% de los niños trabajadores realiza trabajos peligrosos y el 25% no asiste a la escuela. Por otra parte, la ENTI 2019 muestra que el trabajo infantil ocurre principalmente en los estados centrales de Puebla y Michoacán, y los estados sureños de Oaxaca y Chiapas, y el 61% de los niños trabajadores son varones”, dice el informe.

Pandemia, otro factor en contra

Como ha publicado El Economista, la pandemia habría provocado que la población menor de edad laborando aumente a 3.5 millones de niñas, niños y adolescentes. La OIT estima que por cada punto porcentual de incremento en la pobreza, el trabajo infantil sube 0.7 por ciento.

La pobreza en México aumentó 9.1 puntos en 2020, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), y pasó de 41.5 a 50.6% de la población. Eso significaría que al menos 210,000 niñas y niños más comenzaron a trabajar a lo largo del año.

Según el informe de Estados Unidos, “el número de niños que realizan trabajo infantil crecerá 5.5%”. También indica que “los niños de poblaciones indígenas tienen más probabilidades de trabajar en todos los sectores, como en la agricultura, que los niños no indígenas”.

En otro informe, el Departamento de Estados Unidos incluye la lista de los productos elaborados o cultivados por niñas, niños y adolescentes en México, éstos son:

  • Pornografía
  • Prendas de vestir
  • Artículos y accesorios de cuero
  • Ejotes
  • Ganado
  • Café
  • Pepinos
  • Berenjenas
  • Melones
  • Cebollas
  • Amapola
  • Caña de azúcar
  • Tabaco
  • Chiles
  • Tomates

Recomendaciones de políticas públicas

Otro de los avances del gobierno mexicano, según el informe, es la creación de una red nacional de Comités Locales para Prevenir y Erradicar el Trabajo Infantil y Proteger a los Trabajadores Adolescentes en Edad Permitida. “Además, publicó el Programa Nacional de Derechos Humanos 2020-2024 y el Programa Nacional de la Secretaría de Trabajo y Bienestar Social para 2020-2024”.

Sin embargo, las inspecciones a centros de trabajo que usan la fuerza de trabajo infantil se hicieron “sólo después de recibir quejas formales” y las autoridades laborales y penales carecen de recursos humanos y financieros. Otro fallo es que “los programas sociales para combatir el trabajo infantil no abordan todos los sectores relevantes en los que se encuentra el trabajo infantil en México”.

Por ello el gobierno estadounidense sugiere, indicó Mary Ellinson, llevar a cabo inspecciones laborales específicas y sin previo aviso en todos los sectores, incluso en el informal y en las zonas rurales, “donde es más probable que ocurra”.

“Recomendamos también que amplíe el acceso a una educación de calidad, aumentando la infraestructura escolar”. Para este punto es necesario que capacite y procure las mejores condiciones laborales del personal docente, que proporcione materiales educativos en sus lenguas maternas y garantice el acceso a la educación a la niñez migrantes o indígena.

CON INFORMACIÓN VÍA EL ECONOMISTA

Refugio a más de 800 niños víctimas de abuso sexual

La Red Nacional de Refugios (RNR) señaló que, de marzo a octubre, en sus albergues recibió a poco más de 800 menores víctimas de violencia sexual.

Wendy Figueroa, directora de la red, expuso que la familia es uno de los espacios donde se generan estas agresiones a los derechos humanos de las niñas y de los niños y donde necesitamos poner atención e implementar acciones intersectoriales.

En el seminario Machismo y adultocentrismo como detonantes de la violencia de género que viven las niñas, convocado por Tejiendo Redes Infancia, también resaltó que de acuerdo con organismos internacionales durante el confinamiento por la pandemia de Covid-19 de igual manera ha habido un incremento de pornografía infantil.

Indicó que el quedarse en casa y tener acceso a las tecnologías ha llevado, y así lo han dicho diversos informes y organismos, un gran incremento en la pornografía infantil tanto en la generación del material como el consumo.

Figueroa mencionó que el aumento de esta violencia contra menores se ha registrado en Europa y América Latina, pero en México no hay datos oficiales al respecto, lo cual ahí también te refleja cómo los niños, las niñas y adolescentes están invisibilizados.

Agregó que, al día, 32 niñas de entre 10 y 14 años son madres como resultado de estas violaciones sexuales en su contra.

Con información vía La Jornada

México ocupa el primer lugar en abuso sexual infantil, advierte organización

México ocupa el primer lugar en abuso sexual infantil en el mundo, tan sólo cuatro de cada diez delitos son cometidos en contra de menores por parte de familiares y gente cercana a su entorno, de acuerdo con Aldeas Infantiles SOS, una organización sin fines de lucro.

“Esta es sólo una estimación, porque únicamente el dos por ciento de los delitos se denuncian debido a que los niños se quedan callados por miedo, culpa o temor”, explicó Diana Rosales Espinosa, directora general de Aldeas Infantiles SOS México, tras dar a conocer la campaña “¡Escucha su voz!”.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) reportó que cada año 5.4 millones de menores en el país son víctimas de abuso sexual y, en el 60 por ciento de los casos el agresor es una persona cercana a la familiaque incluye desde padres, padrastros, tíos y vecinos.

Asimismo, por cada mil casos de abuso a menores, únicamente cien se denuncian, sólo diez llegan a juicio y únicamente un caso llega a condena, añadió Efraín Guzmán García, coordinador nacional de Protección Infantil.

El hogar se ha convertido en una de las zonas de mayor peligro para los menores: seis de cada diez agresiones se comenten en ese entorno, “donde se supone, deben estar protegidos”, precisó el coordinador en el marco del Día Nacional Contra el Abuso Sexual Infantil, que se conmemora cada 19 de noviembre.

“En la primera infancia, hasta los cinco años de edad, los agresores suelen ser en un 30 por ciento los padrastros; en un 30 por ciento los abuelos y en un 40 por ciento tíos, primos, hermanos o cuidadores”, detalló. Se calcula que una de cada cuatro niñas, así como uno de cada seis niños sufre violación antes de cumplir la mayoría de edad.

“La tasa de violación de niñas y niños en México es de mil 764 por cada cien mil, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), y se eleva 5 mil de cada cien mil, cuando se trata de tocamientos”, abundó.

En conferencia de prensa, Rosales y Guzmán explicaron que el confinamiento por la pandemia elevó aún más los ataques contra los menores.

De acuerdo con los datos reportados por la Secretaría de Gobernación, desde marzo se registraron más de 115 mil llamadas de emergencia al 911 por incidentes contra mujeres, niñas y niños, por abuso sexual, acoso sexual, violación, violencia de pareja y violencia familiar.

“Esto significa que cada día, al menos 150 personas fueron violentadas cada hora, de acuerdo con esos datos confirmados por la Secretaría de Gobernación. Estamos hablando que las llamadas de auxilio se elevaron más del 30 por ciento”, agregó Guzmán García.

En el confinamiento, dijo, los niños al interior del hogar fueron sometidos a maltrato físico, emocional y sexual, en el que hubo abuso de poder con fines de sometimiento.

En el lanzamiento de la campaña “¡Escucha su voz!”, los panelistas informaron que, de acuerdo con el Inegi, en el 2019 se detectaron 827 mil 898 usuarios de pornografía infantil. El 60 por ciento de este tipo de contenido producido en México se realiza con fines de trata de menores.

Sin embargo, en el país, Rosales Espinosa, únicamente 3 mil 320 casos han sido clasificadas por las autoridades judiciales como trata de personas. Se calcula que cada 24 horas hay 12 menores que son vendidos o usados confines de explotación sexual por tratantes de Coahuila, Chiapas, Chihuahua y Baja California.

“Uno de los sectores más vulnerables son los niños migrantes sin acompañamiento, el 85 por ciento de ellos se desplazan solos desde el sur y hacia el norte”, precisó la directora.

En conferencia de prensa, los representantes de Aldeas Infantiles SOS México se manifestaron en contra de la castración química contra los violadores, pues aseguraron que se trata de personas cercanas, y lo que se debe ponderar es el interés y los derechos de los menores.

En la presentación de campaña se proyectó un video para hacer conciencia de la dificultada que tienen los menores para expresar que son víctimas de agresión, debido a las amenazas y la limitación de las palabras para externar sus emociones, de allí la importancia de que los juguetes sean el medio de manifestar esos temores. “No hay que olvidar que el 97 por ciento de los niños que se atreven hablar dicen la verdad”.

Además, se pudieron a disposición de la población guías con recomendaciones para detectar signos de alerta, que van desde la tristeza, el dejar de hacer actividades que antes desarrollaba, falta de apetito, orinarse, temores nocturnos; y se proporcionó ayuda psicológica para los menores durante el confinamiento y asesorías de tipo legal para denunciar.

Sin embargo, aclararon que resulta esencial que el gobierno federal destine más recursos a la atención de los menores víctimas de abuso sexual y se capacite al personal de los ministerios públicos y fiscalías para evitar revictimizar a los infantes que levantan su voz.

Con información vía Milenio