La emblemática Plaza de Mayo de Buenos Aires volvió a ser escenario del reclamo por el aumento de la pobreza y el desempleo en Argentina. Sindicatos, partidos políticos y organizaciones sociales confluyeron en la celebración católica de San Cayetano frente a la Casa de Gobierno para denunciar la “emergencia alimentaria, social y laboral”.
“Vemos una ola de despidos y un ataque frontal a la clase obrera (…). Hay un gran ajuste a los trabajadores, que estamos muy complicados en todo el país”, dijo a Sputnik Alejandro Crespo, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino, desde la movilización.
Decenas de miles de personas —entre militantes y autoconvocados— se manifestaron a las puertas de la Casa Rosada en una movilización convocada bajo un lema concreto: “Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo”. La movilización se inscribe en un sensible escenario social, signado por el aumento de la pobreza, que ya alcanza al 55% de la población, y del desempleo, disparado al calor del derrumbe del consumo alimentado por la fuerte recesión que atraviesa el país.”Hay una caída del salario y las jubilaciones, mientras sube la pobreza y la indigencia. El 20% de la población no puede comer, y esto es resultado de lo que hace el Gobierno”, dijo a Sputnik desde la concentración Gabriel Solano, legislador de la Ciudad de Buenos Aires y dirigente del Frente de Izquierda.
Entre los principales convocantes resaltan organizaciones sociales como la Unión de Trabajadores de la Economía Popular y el Polo Obrero, además del movimiento de Iglesias Evangélicas. Sin embargo, el gremialismo se hizo presente a través de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) y de diversos sindicatos.Los movimientos populares tienen sobradas razones para protestar. Además de la pauperización de los indicadores sociales, uno de los reclamos centrales responde a la resistencia del Gobierno a distribuir alimentos a los comedores populares, a pesar del dictamen judicial que obliga al Poder Ejecutivo a repartir la comida almacenada para tal fin.
Además de las agrupaciones de base, diversos dirigentes políticos participaron de la convocatoria. “Con un paro activo y un plan de lucha, a Milei los trabajadores lo podemos derrotar. Tenemos que superar el colaboracionismo con el Gobierno”, enfatizó en diálogo con Sputnik Néstor Pitrola, dirigente del Partido Obrero y ex diputado nacional. La movilización por el Día de San Cayetano nació en 2016, durante la presidencia de Mauricio Macri (2015-2019), cuando decenas de organizaciones sociales decidieron marchar contra el ajuste fiscal desplegado por el Gobierno. Desde entonces, el salario real acumula siete años de caída consecutiva.
CON INFORMACIÓN SPUTNIK