Mexico

Nearshoring y Reshoring: ¿qué le preocupa a Estados Unidos?

Motivados sobre todo por la necesidad de ya no depender más de un solo país para sus operaciones en el exterior (China), casi 90 por ciento de los directores generales y directores de manufactura de empresas en Estados Unidos, están considerando una combinación de nearshoring entre México y Canadá, y reshoring, es decir, regresar operaciones a Estados Unidos.  

En el caso de México, la cercanía con la frontera y la calidad de la mano de obra, son algunos de los factores atractivos, si bien el acceso a suministro de electricidad seguro, estable y, de preferencia, de fuente renovables; la inseguridad; la escasez de agua y la certeza jurídica, son algunos de los temas que preocupan, señaló Omar Troncoso, socio y director general de Kearney México.

Sobre los servicios de telecomunicaciones como factor de decisión para el nearshoring, dijo que hasta ahora, los empresarios de aquel país no le han hecho comentarios específicos. 

“Yo creo que en ese sentido lo ven bien. De hecho, antier participé en un foro donde estuvo la directora de Asuntos Corporativos de AWS explicando con mucho detalle la inversión que se está haciendo para los servidores y si acaso lo que ella hablaba es que cada vez México va a estar mejor conectado y con mejor infraestructura para eso y yo creo que desde ese punto de vista no lo veo como un factor que afecte”.

Al presentar el “Reshoring Index 2024”, encuesta que la empresa consultora levanta anualmente desde 2013 con 120 directores ejecutivos (CEO, por sus siglas en inglés) y 120 ejecutivos de manufactura de compañías de diversos giros y dimensiones en Estados Unidos, Troncoso Campuzano explicó que 45 por ciento de los directores ejecutivos y 52 por ciento de los ejecutivos de manufactura, piensan en México como opción para relocalizar sus empresas.

En tanto, 41 por ciento de los directores ejecutivos y 43 por ciento de los ejecutivos de manufactura miran a Canadá como opción, mientras las cifras de quienes piensan devolver sus operaciones a diversas partes de Estados Unidos, son de 86 por ciento de los directores ejecutivos y 83 por ciento de los ejecutivos de manufactura, si bien cada día se observa una mayor tendencia a diversificar las operaciones en varios países a la vez.

Asimismo, 54 por ciento de los ejecutivos de manufactura dijeron que han ejecutado o tienen considerado ejecutar en el corto plazo acciones de nearshoring, indicador que alcanza 39 por ciento de los directores generales. 

El tema de la relocalización de operaciones está presente cada día más en las empresas en Estados Unidos; prueba de ello es que en 2023, el 73 por ciento de los directores ejecutivos dijeron que los miembros de la Junta Directiva de sus empresas les preguntaron sobre el particular, lo mismo que 64 por ciento de los colaboradores; el 60 por ciento de organizaciones industriales y 38 por ciento de los gobiernos locales, estatales o federal.

Sobre la ventana de oportunidad de México en el nearshoring, consideró que “mientras los empresarios (estadounidenses) estén buscando hacer la relocalización a Estados Unidos, a México le va a seguir durando el atractivo, con todo y que tengamos muchos retos, porque sí es un mal necesario –si lo quieres ver así—porque hay partes de los procesos que se tienen que hacer aquí, por lo menos en el corto plazo”.

Respecto a los escenarios electorales que enfrentarán ambos países en los próximos meses, anticipó que “si los resultados (en México) son para un partido, probablemente sea continuidad de lo que estamos viendo ahora y entonces, ya estamos operando así, ya nos lo sabemos y si son para el otro partido, puede ser que mejoren algunas cosas, pero yo creo que no se ve ningún factor negativo, yo creo que se ve igual o tal vez mejor”.

En el caso de Estados Unidos, el eventual triunfo de Donald Trump en las elecciones de noviembre, sólo podría reforzar el nearshoring y el reshoring, movimiento que –recordó—se inició cuando el republicano fue presidente en la Unión Americana.

Durante los últimos tres años (2021, 2022 y 2023), el 79 por ciento de los directores ejecutivos y ejecutivos de manufactura han realizado operaciones de relocalización hacia Estados Unidos, el 27 por ciento hacia México y el 24 hacia Canadá, sin descuidar un porcentaje que se observa en el caso de América Central y el Caribe, con 20 por ciento, “hacia donde se dirigen sobre todo operaciones de la industria textil, donde la mano de obra sigue siendo barata”.

A propósito del precio de la mano de obra en México, dijo que ésta ha crecido notablemente “a razón de 20 o 25 por ciento anual”, tanto por acciones de gobierno, como el incremento al salario mínimo, como por la competencia entre diversas industrias, que han encarecido este recurso.

Mientras el movimiento del reshoring y nearshoring continúa, es evidente que China ha sufrido las consecuencias. “Los países asiáticos de bajo costo (entre ellos Vietnam, Tailandia, Taiwán, India y Malasia) y China, experimentaron una reducción del 14 por ciento en sus exportaciones conjuntas hacia Estados Unidos”, entre 2022 y 2023, al pasar de un billón 22 mil millones de dólares a 878 mil millones de dólares, respectivamente. 

En este conjunto, China mostró una caída del 4.0 por ciento de sus exportaciones hacia Estados Unidos, al pasar de 51 por ciento en 2022 a 47 por ciento en 2023. 

En el caso de México, las exportaciones de manufacturas a Estados Unidos aumentaron en 5.0 por ciento entre 2022 y 2023, al pasar de 401 mil 800 millones de dólares a 422 mil 300 millones de dólares, respectivamente, con los incrementos más significativos en transporte (37 por ciento); equipo eléctrico y electrodomésticos (31 por ciento); productos manufacturados diversos (30 por ciento) maquinaria no eléctrica; y alimentos (26 por ciento, cada uno). 

CON INFORMACIÓN VÍA CONSUMO TIC

You may also like

Leave a reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *