TENDENCIAS_ El trabajo remoto refuerza el compromiso de las personas con su empresa, comprueba un estudio

Uno de los principales miedos que siempre han tenido las empresas a la hora de implantar el trabajo remoto ha sido el temor a que las personas colaboradoras se distanciasen de su organización y de sus compañeros.

Esa brecha podría generar un desapego que hiciese que las personas les diesen más importancia a otras facetas de su vida. También que se sintiesen más atraídos por otras organizaciones.

Es por esto que, cuando las empresas se vieron obligadas a implantar el trabajo remoto durante la pandemia, temieron que se diesen altos índices de desapego y una caída de la productividad como nunca habían sufrido.

Por suerte, salvo en contadas excepciones, la realidad es que las personas empleadas siguieron laborando igual que lo hacían en las oficinas (en ocasiones, incluso más).

El mundo de vuelta a sus sitios de trabajo

Las restricciones pandémicas se relajaron y pudieron volver a la modalidad presencial, pero muchas pelearon porque este formato permaneciera.

Algunas compañías decidieron adoptar un modelo híbrido, pero la preocupación por el desapego continuó y surgieron propuestas como la posibilidad de laborar por todo el mundo para conocer el país o la ciudad natal de los compañeros. 

Gigantes de la talla de Microsoft, por ejemplo, han indicado que existe una «paranoia de la productividad» respecto al trabajo remoto.

Han asegurado que estos miedos se basan en la desconexión que existe entre las expectativas de los jefes, que piensan que su plantilla laboral no rinde lo suficiente. También en las de las personas empleadas, que sienten que son muy productivas.

¿Qué pasa con el compromiso?

Un nuevo estudio dio la razón a quienes piensan que esos temores son infundados.

La consultora Vyopta publicó un informe centrado en analizar las videoconferencias y cómo estas afectan a la colaboración en entornos laborales.

El estudio apunta que las personas trabajadoras que han laborado o actualmente lo hacen en casa, esto entre 2020 y 2022, incrementaron su compromiso con el resto de sus colegas.

El informe, que recoge TechSpot, fue elaborado comparando las reuniones en línea que mantuvieron integrantes de compañías como Zoom, Microsoft Teams o Webex en las seis semanas comprendidas entre principios de abril y mediados de mayo de los años referidos.

Los resultados constataron que las organizaciones han aumentado 60% el número de juntas virtuales; pero han empezado a acortar la duración de las mismas y a priorizar aquellas con un número pequeño de personas.

La media de reuniones en línea semanales por integrante es de ocho, cuando antes era de cinco. Pero el tiempo pasó de 43 a 33 minutos en promedio, y el número de integrantes de 20 a 10.

Según Vyopta, las personas que dejaron las empresas durante el periodo de estudio participaban menos en las reuniones en esta modalidad.

20% más bajo que sus colegas en las reuniones en grupo, 22% menos en las reuniones individuales y hasta una caída de 67% en un modelo de reunión que la consultora cataloga como «interacciones individuales espontáneas».

A modo de conclusión de su estudio, desde la firma aconsejan a las organizaciones intentar fomentar la participación de las personas empleadas en las reuniones en línea.

No obstante, no deben imponer la asistencia a todas las que se celebren y no obligar a la gente a conectar su cámara; esto que las interacciones de audio también facilitan los vínculos sociales y evitan la denominada «fatiga Zoom».

CON INFORMACIÓN VÍA BUSINESS INSIDER MÉXICO

Teletrabajo se incrementa 30% en América Latina

El trabajo a distancia, también conocido como teletrabajo o Home Office fue impulsado por la pandemia de COVID-19 y actualmente ronda 30% de empleados bajo este formato en promedio, mientras que antes del confinamiento la cifra era apenas de 3%.

Alexander Torrenegra, CEO de Torre.co, asegura que actualmente las empresas ya han obligado a los trabajadores a regresar de manera física a las oficinas, sin embargo, la mayoría de los empleados quieren continuar con el beneficio que significa para ellos laborar desde sus hogares.

El director de dicha compañía, que se dedica a automatizar el reclutamiento y la búsqueda de trabajo flexible, señala que actualmente las tendencias que predominan en Latinoamérica son tres diversos tipos de formatos de trabajo: remoto, híbrido y lo que muchas empresas aún están considerando: regresar a trabajar de manera física como siempre se había acostumbrado.

Sin embargo, en este 2022, se espera que más organizaciones apuesten por el trabajo híbrido, lo cual es una combinación de días con actividades presenciales y otros de trabajo en casa.

De acuerdo con un reporte de Torre.co, lo que estamos presenciando actualmente es la reapertura de oficinas que exigen la modalidad presencial para sus empleados. Asegura que el regreso a las actividades presenciales se ha hecho sin darse cuenta que mucho del talento humano que está presente en la región, está siendo desperdiciado por no exponerlos a mejores empleos.

Incluso, afirma que el trabajo remoto no se limita a permanecer en la misma empresa dentro del país de origen, pues se han abierto muchas oportunidades a nivel mundial y de acuerdo con Alexander Torrenegra,  el número de personas que trabajan con compañías fuera del país se multiplicó por 33 el año pasado.

“Solíamos encontrar trabajo en donde vivíamos, ya no. Ahora gracias al trabajo remoto en lugar de que el talento vaya a donde se encuentran las empresas, cada vez más se están dando cuenta de que necesitan ir a donde se encuentra el talento”.

“Estamos viviendo una ola de movimientos de resistencia por parte de empleados que desean mantener privilegios de trabajar desde casa. No es una casualidad que el 8 de diciembre de 2020 la Cámara de Diputados aprobó adiciones a la Ley Federal del Trabajo. Esta acción reforma el Artículo 311 de dicha ley y agrega otros 11 artículos, todos vinculados al trabajo remoto, siendo los derechos a la desconexión, capacitación y pago de servicios, algunas de las obligaciones que esta nueva norma impone a los patrones”, comenta Torrenegra.

Incluso entre septiembre de 2019 y agosto de 2021, nueve países latinoamericanos Costa Rica, Panamá, El Salvador, Chile, Argentina, México, Colombia, Paraguay y Uruguay, adoptaron leyes de teletrabajo, actuando en el marco de la pandemia y preparándose para el futuro del trabajo.

Para Torrenegra, sólo es cuestión de tiempo para que las compañías puedan visualizar una mejor manera de contratar personal y talento humano, ya que se avecina un gran avance en reclutamiento a través de la nube.

En Latinoamérica 59% de los consumidores sigue aislado en casa, 26% ha salido para trabajar o estudiar con horarios flexibles y 16% ya volvió a su rutina, de acuerdo con el estudio de Grupo de Diarios América (GDA) y Tendencias Digitales.

El experto asegura que este 2022 tanto los trabajadores como las empresas buscarán las maneras adecuadas de empatizar las diversas diferencias que se presentan en cada uno de los casos. Dijo que será momento de que las empresas reconozcan que la implementación de esquemas de trabajos flexibles, entrega un sinnúmero de ventajas a las organizaciones.

“El trabajo flexible seguirá consolidándose como una megatendencia que llegó para quedarse, habrá más apertura a la contratación de talento remoto internacional a través de plataformas digitales. Al mismo tiempo que tendremos personal de vuelta en sus oficinas, veremos a nuevos candidatos ingresar a compañías internacionales desde cualquier parte del mundo”, asegura.

CON INFORMACIÓN VÍA ONCE NOTICIAS DIGITAL