By El uso de la inteligencia artificial en las campañas electorales será inevitable y, por el momento, los abusos que pudiera generar con el uso arbitrario de datos personales de los electores, estrategias de persuasión que degeneren en manipulación y noticias falsas, no se podrán regular, pues no existe un marco legal adecuado. En ese sentido, la corresponsabilidad, la ética y la conciencia de cada persona, están llamadas a colocarse en el primer frente de defensa para evitar daños mayores.
La IA es una herramienta disruptiva, que a diferencia del desarrollo computacional, cuya magnitud y poder podría duplicarse cada dos años, hoy tan sólo el desempeño del procesamiento gráfico, podría multiplicarse mil veces en 10 años, lo que significa un salto cualitativo que se debe de entender y regular, coincidieron diversos expertos.
Durante el encuentro virtual Politinnova, especializado en tecnología para gobiernos, campañas electorales y comunicación política en México, Itzul Girón, presidenta del Consejo de Datos y Tecnologías Emergentes, advirtió que la inteligencia artificial no es el único desarrollo tecnológico que está en curso, pero sí el más conocido y, evidentemente, tendrá injerencia en las campañas electorales de este año.
La herramienta permite, por ejemplo, identificar a nivel ya no sólo de estado o municipio las preferencias de los electores, sino incluso a nivel de sección electoral y con ello, sugerir a los candidatos el discurso que deben presentar en cada caso y en cada canal.
Por cierto, herramientas de inteligencia artificial han demostrado que, en este 2024, la red X (antes Twitter), pierde relevancia como espacio donde los potenciales electores miran a los candidatos, con 8.0 por ciento, lo mismo que Facebook, donde la cifra llega a 15 por ciento, mientras Whatsapp y Tic Tok cobran relevancia y, sorprendentemente los correos electrónicos personalizados, que crecen del 16 por ciento de vistas a 32 por ciento.
Todo ello, es parte de las mediciones que se pueden hacer con inteligencia artificial y les funcionan a los candidatos, si bien es importante tomar en cuenta que apenas 13 por ciento de los datos usados para entrenar los modelos de inteligencia artificial, son aportados por humanos, mientras el resto “se generan por sí solos”, a partir de la actividad de las personas en las redes y de herramientas que ya están ahí como la geolocalización, el análisis de imágenes y los datos sintéticos.
En ese sentido, Itzul Girón destacó que si bien es necesaria la regulación de la inteligencia artificial, uno de los retos más importantes consiste en explicar a los desarrolladores dónde van a programar la ética de un modelo de aprendizaje y cómo se va a definir la trazabilidad de la toma de decisiones de un modelo autónomo y de ahí que los legisladores deben ser asesorados por técnicos para que entiendan qué es esta tecnología, antes de pretender regularla.
Y mientras tanto, se debe promover la educación en materia de tecnologías emergentes que ya se usan para el diseño y desarrollo de campañas electorales y que, por cierto, en su mayoría se desarrollan fuera de México.
A su vez, en un panel posterior titulado “Análisis predictivo para entender a los votantes”, Pablo Corona, presidente de la Asociación de Internet MX destacó que la Inteligencia Artificial es simplemente una herramienta y, por lo tanto, como cualquier otra, puede ser usada para el bien o para el mal y, en el caso de las campañas electorales, tiene el potencial de generar información falsa muy perniciosa, por lo que es deseable la responsabilidad de los diferentes actores (la ciudadanía incluida), para determinar qué de todo lo que se ve en las campañas es cierto y qué no.
Destacó que en un ambiente de volatilidad e incertidumbre, es necesario plantearse los temas éticos relacionados con esta potente herramienta, mismos que no van a resolver los técnicos, sino las personas especializadas en el estudio de la ética, la filosofía y otras materias afines, en el entendido de que “no podemos hacer responsable legalmente a una máquina por las decisiones que tome y por eso, siempre necesitamos que una persona esté detrás de las decisiones de las máquinas”.
A su vez, Jorge Hidalgo Toledo, coordinador del Posgrado de Comunicación de la Universidad Anáhuac, advirtió que hay un grave riesgo en los datos personales de los individuos, más allá del consentimiento informado que demos o no a las diversas aplicaciones que usamos a diario.
De hecho, con base en algoritmos que ya existen y están actuando en el mundo digital, la información de las personas es tomada como una huella digital sin preguntarle y por lo tanto “tu información está en manos de no sabemos quién”.
Esto lleva a que más allá de la persuasión, se lleven a cabo campañas de manipulación en las redes sociales, que son en realidad “cámaras de eco”. En estos comicios, advirtió, el espacio digital vivirá una auténtica guerra de desinformación, pues se convertirá en un espacio de lucha, donde se pueden generar entornos ambiguos para los votantes.
En su oportunidad, Ricardo Homs, de la Academia Mexicana de Comunicación, advirtió que hay muchos riesgos en el uso –y abuso—de la Inteligencia Artificial para las campañas electorales y por ello es necesario regular el uso de la herramienta, aunque se debe cuidar que esta regulación no quede absolutamente en manos del Estado, porque se podrían generar serios riesgos de abuso y coerción contra la libertad de expresión e incluso contra el sano desarrollo democrático.
Por cierto, anticipó que en estas elecciones, si bien habrá uso de esa herramienta para las campañas políticas, es más probable que hacia las próximas elecciones intermedias (de 2027), sea cuando realmente se vea todo el potencial de la inteligencia artificial aplicada a las campañas, con todos los riesgos de manipulación que puede significar.
A su vez, Nicolás Muciño, del medio digital Cadena Política, destacó que ante las próximas elecciones “la percepción está muy alterada”, en particular entre los jóvenes, que representan ya 37 por ciento del electorado.
En ese sentido anticipó que los candidatos que entiendan este sector, serán quienes obtengan los triunfos electorales, si bien advirtió los riesgos de manipulación que se viven, sobre todo con la intrusión en las vidas privadas de las personas, que está presente cuando se “aceptan las condiciones” de algún servicio digital que de otro modo no se puede usar.
CON INFORMACIÓN VÍA CONSUMO TIC
